Semana 1 | Día 4 | Dar el diezmo es poner a Dios primero

Mandamiento:

“Y ahora, oh Señor, he traído a tu altar las primicias de la tierra que me has dado”. Deuteronomio 26:10 (NBV)

Leer:

Todos los años deberás apartar la décima parte de todas tus cosechas. En presencia del Señor tu Dios en el lugar que él escogerá como santuario, allí comerás el diezmo de tus cereales, de tu vino, de tu aceite y de las primicias de tus ovejas y vacas. El propósito de los diezmos es que aprendas a poner a Dios siempre en el primer lugar de tu vida. Deuteronomio 14:22-23 (NBV)

Reflejar:

Nuestra iglesia tenía estas bolsas de terciopelo rojo que se pasaban entre cada fila cuando llegaba el momento de recolectar sobres de generosidad. Nos recordaba a nuestra infancia y como veíamos a nuestros padres sacar unos cuantos dólares para donar a nuestra iglesia mientras el palo de madera con la bolsa en el extremo pasaba por nuestra fila. Así que cuando la bolsa roja llegaba a nosotros, como nuevos seguidores de Cristo, creíamos que éramos importantes al dejar un billete de veinte dólares, quince más de lo que estábamos acostumbrados a ver que otros daban cuando éramos niños.

Más tarde entendimos lo que realmente significaba el diezmo. "Todos los años deberás apartar la décima parte de todas tus cosechas." (Deuteronomio 14:22). Una décima parte de los ingresos anuales era significativamente más que los veinte dólares que estábamos dando. Este descubrimiento nos causó sorpresa temporalmente y reveló los cambios que Dios nos estaba pidiendo que hiciéramos a nuestras finanzas. Él quería que fuéramos generosos con él.

El diezmo no es simplemente dar una propina a Dios. Él no lo necesita. Él busca corazones. Darle nuestra décima parte es un acto de honrarlo. Es elegirlo primero por encima del dinero.

Reaccionar:

¿Dónde está tu corazón cuando se trata del diezmo? ¿Acaso es tiempo de comenzar a honrar al Señor con lo que él te está pidiendo?

Orar:

Señor, quiero honrarte. Muéstrame dónde no te estoy poniendo primero. Ayúdame a cambiar eso a través de mi generosidad hacia ti.